Te marchas y yo me quedé ahí parada. Ahogándome con cada palabra que nunca te dije y quedándome con las ganas, y tú me preguntas de qué, y yo te respondo de abrazarte, de besarte, de seguirte y de decirte que necesito que te quedes a mi lado, al menos, una noche más. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario